viernes, 2 de diciembre de 2016

PLACER INTELECTUAL

POR MARÍA DEL MAR MONCADA

Para tener una vida plena llena de placeres, es necesario tener un control sobre ello. El sentido de vida es ese motor que nos impulsa para hacer las cosas, como se dice, es ese sentido que le encontramos a nuestra vida para ir en busca de la felicidad absoluta.

Los sistemas éticos son la reflexión ética sobre las acciones humanas y sobre cuál de ellas hace más feliz al hombre. Busca el ser y el hacer de la vida un compromiso de cómo fortalecer la conciencia del deber, del derecho y de la responsabilidad.
Uno de ellos es el Epicureísmo donde nos dice la búsqueda de una vida feliz mediante la búsqueda inteligente de placeres. Esto quiere decir que la vida no solo necesita de placeres físicos, sino que también necesita placeres intelectuales.

Según Adolfo Sánchez Vázquez, “el epicúreo alcanza el bien, retirado de la vida social, sin caer en el temor a lo sobrenatural, encontrando en sí mismo, o rodeado de un pequeño círculo de amigos, la tranquilidad de ánimo y la autosuficiencia” esto se refiere que el placer como la satisfacción de las necesidades del cuerpo y la tranquilidad del alma.

En mi vida, pasan situaciones que uno se toma un tiempo para pensar y mirar su alrededor, haciéndose una auto revisión de que cosas me están haciendo sentir feliz. Como ser humano que soy vivo de ciertos placeres, no todo el tiempo físico. Se necesita de alguien o algo para que sobrevivas en esta sociedad. Yo siempre he dicho que uno necesita del otro, porque cada persona es un mundo diferente que complementa a los demás. Para llegar a la felicidad según el epicureísmo se necesita producir un placer que es el principio y el fin de una vida feliz. Pero para que el placer sea real debe ser moderado, controlado y racional.

Pero no todo el tiempo podemos hablar de la felicidad, porque no todo es así. Lo malo de este asunto es todo lo que nos produce dolor, aburrimiento, es como ese sin sabor que nos queda cuando hacemos algo o incluso cuando no estamos conformes a lo que hicimos.

El epicureísmo tiene dos maneras de explicar el sentido de vida, por un lado los placeres del cuerpo y del alma.  Distinguía entre dos tipos de placeres, basados en la división del hombre entre dos diferentes pero unidos, el cuerpo y el alma:

·         Placeres del cuerpo: aunque se considera que son los más importantes, en el fondo su propuesta es el equilibrio voluntario y consciente de estos placeres, no su eliminación; no es posible conocer el placer si no se conoce el dolor, no se disfruta de un banquete si no se conoce el hambre.
·         Placeres del alma: el placer del alma es superior al placer del cuerpo: el corporal tiene vigencia en el momento presente, pero es breve, mientras que los del alma son más duraderos y además pueden eliminar o atenuar los dolores del cuerpo.

Algo fundamental que tengo es pensar antes de actuar, ya que gracias a la razón, sé que es lo bueno y lo malo. Esto me ayuda a reconocer que verdaderamente necesito para ser feliz y además reconocer lo que me gusta y me hace sentir bien. Después de todo llego a una conclusión y también a una finalidad que es siempre sentirme bien con las cosas que hago o pienso.
Para Epicuro, los placeres y sufrimientos son consecuencia de la realización o impedimento de los apetitos. Epicuro distingue entre cuatro clases de apetitos, por tanto placeres:

Ø  Los naturales y necesarios, como alimentarse, abrigo, y el sentido de seguridad, que son fáciles de satisfacer.
Ø  Los naturales pero no necesarios, conversación amena, gratificación sexual.
Ø  Los no naturales ni necesarios, la búsqueda del poder, la fama, el prestigio.
Ø  Los no naturales necesarios, dinero, ropa...

Puedo decir que una de mis mayores satisfacciones o placeres es tener lo que quiero así no lo necesite, por lo menos, soy amante de la ropa, me gusta tener ropa nueva, eso es algo que me llena de placer y me hace feliz.

Por otro lado siempre busco saciar mis necesidades como el apetito, el sentirme bien con las personas que me rodean, aunque puedo decir que  algunas veces  escojo a mis amigos si tienen cosas en común conmigo, esto hace que me sienta segura al momento de hablar de algo.

Todo esto es una esencia de mi vida, es lo que me caracteriza, no siendo una persona tan materialista pero siempre busco sentirme bien, sin embargo también me aferro a las cosas o a las personas que considero importantes en mi vida, por lo tanto si llegara a pasar algo, recaería y llegaría a una tristeza extrema según el caso. Eso afecta mi armonía y la de las personas que me rodean, porque sin pensarlo tomo actitudes que no son agradables para los demás sin darme cuenta que las estoy haciendo. Como persona cometo errores pero también los reconozco. Lo principal de mi vida es conseguir las cosas que me hacen feliz pero también tratando de ayudar a las personas a sentirse bien como son.